Evento flamenco

Indigo.

Conciertos 2.

     Inauguro con esta reseña un nuevo apartado del blog: conciertos.

Sorprenderá que empiece por el número 2 pero creo que el primer puesto debe estar destinado al que ha dado origen a este blog. Evidentemente se trata del concierto que dio en Barcelona The musical Box.

    Volviendo al que nos ocupa, y que se celebró el pasado sábado por la noche en un coqueto teatro de apenas 150 asientos en el patio de butacas  y con una acústica  magnífica,  comentar que se celebraba con la intención de homenajear a la mujer flamenca.

    El cartel anunciaba a Melchora Ortega , cantaora jerezana, y a Inés Bacán , lebrijana de una larga estirpe flamenca.

    Entramos 10 minutos antes de comenzar y la primera sorpresa desagradable fue comprobar que  no había ni un triste folleto explicativo de quién actuaba . Cabe recordar que al flamenco se va a ver si pasa algo y ya lo creo que paso : apenas unas treinta entradas vendidas a pesar de su precio (10 euros la más cara).

    En primer lugar actuó Melchora acompañada de guitarra y dos palmeros e hizo gala de su buen humor al ver el desolado aspecto del patio de butacas. Una actuación de unos 45 minutos en la que toco bastantes palos: tientos- tangos, fandangos, seguiriyas, bulerías... Hubo una parte más festera al comienzo y final acompañada por todo el conjunto y una menos fácil para el público en la que estuvo sola acompañada de guitarra. La cosa estuvo además aderezada por sus continuos comentarios jocosos. En resumen : gusto y tuvo aplausos.

    La segunda en actuar fue “la Bacán” cuya enorme y triste  presencia nada más salir a escena me hace pensar que la mujer debe estar pasando un martirio en su vida personal. Cantó acompaña de guitarra por fandangos, seguiriyas , cantiñas y bulerías. Hasta las cantiñas y  bulerías que se prestan más al jaleo trasmitían una hondura difícil de asimilar para quien solo ha acudido por curiosidad. Siendo cantaora de un escalafón superior apenas sonaron algunos aplausos.

    De los guitarristas cabe decir que ambos cumplieron lo mismo que los palmeros. Lamentablemente, el que falló fue el aficionado , que no se presentó.

   Al final ,creo que el sentimiento unánime de los presentes, tanto arriba en el escenario como en el patio de butacas, era de desolación.

Debo decir ,en justicia, que  todo el recital estuvo acompañado de un buen y joven aficionado que supo decir a los artistas las palabras justas y que recibió el agradecimiento de ambas artistas